La corona de salida de Nuestra Señora del Mayor Dolor, realizada por el sevillano Manuel Seco Imbert del año 1928, una obra historicista, de recuerdo renacentista, donde introduce esmaltes traslúcidos en el canasto y en la aureola, dentro de un diseño que ligeramente recuerda al referente por antonomasia de la Semana Santa Andaluza, la corona de la Esperanza Macarena de Sevilla.
Es de plata de ley sobredorada, labrada a dos caras, con incrustaciones de esmalte de Toledo que representan los misterios del Rosario, los Apóstoles, el escudo de España, el de la ciudad, el del Cardenal Arzobispo de Sevilla (en la fecha que se ejecutó la ciudad de Jerez pertenecía a la Archidiócesis hispalense), el del Ecce-Homo y dos rosetones. Costó por aquel entonces 6000 pesetas.